Recorrido por las 4 fortificaciones más emblemáticas de La Habana

Os dejamos nuestra experiencia de la visita o ruta por las cuatro fortalezas de La Habana. Estamos en la segunda jornada de nuestro viaje a Cuba en 15 días. Ayer hicimos la ruta por la Habana Vieja en un día, además de la Plaza de la Revolución y el Gran Teatro.

Hoy nos disponemos a recorrer las 4 fortalezas que defienden la entrada al puerto de la capital de Cuba, dos de ellas las hemos catalogado como lugares imprescindibles que ver en La Habana.

Qué saber sobre las fortalezas de La Habana

La Habana Vieja es el núcleo histórico de la ciudad, la parte más antigua de la capital fundada por los españoles en 1514. La Habana está dentro de una bahía de bolsa y su puerto se protegió hasta con 4 fortalezas, que todavía se pueden ver y visitar en la actualidad y que en el pasado fueron el escudo protector de la ciudad, una de las llaves del Imperio Español en Ultramar.

Estas 4 fortalezas que defendían La Habana Vieja son:

1. Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro: Ubicación estratégica en un cerro, vigilando la entrada a la bahía desde el siglo XVI para defender la ciudad junto con La Punta. Conquistado por los ingleses en 1763, pero devuelto a España. Destacamos sus vistas panorámicas impresionantes desde sus baterías y terrazas.
2. Fortaleza de San Carlos de la Cabaña: Construida en el siglo XVIII tras la devolución de La Habana por los ingleses. La fortificación más grande de España en América, con diseño militar avanzado. Sede de la ceremonia del Cañonazo.
3. Castillo de San Salvador de la Punta: Construido entre 1589 y 1630 para proteger la bahía junto con El Morro. Incorporaba una cadena de cobre que cerraba la entrada al puerto.
4. Castillo de la Real Fuerza: Primera fortaleza construida en Cuba (1558-1577), diseñada para proteger la ciudad de ataques marítimos. De estilo renacentista, con gruesas murallas y un foso profundo. Icono de La Habana Vieja, coronado por la Giraldilla, símbolo de la ciudad. Actualmente alberga un museo marítimo y de la historia colonial, cerrado esperemos que temporalmente.

Nuestro recorrido por la bahía y los castillos de la Habana

Te dejamos nuestro itinerario con horarios por si lo quieres realizar tú también, o simplemente para que te sirva de guía para hacer uno tú mismo. Es ideal para quienes tienen poco tiempo pero quieren disfrutar de lo imprescindible.

Este tour lo iniciamos en nuestro hotel en un taxi hasta la primera de las fortalezas en la orilla de la Habana Vieja. Recorrimos las dos de este lado de la bahía y luego en transporte nos fuimos hacia el otro lado del estrecho para ver las dos fortalezas que nos quedaban y además visitar el Cristo de la Habana y la Casa del Che Guevara.

Mañana

En la mañana hemos decidido quedarnos en el Hotel Grand Muthu La Habana para descansar y aprovechar la piscina, algún cóctel y comer antes de salir. Hemos decidido esto para aprovechar un poco las instalaciones del hotel. Además, el día de hoy va a ser muy largo, bueno tampoco tanto, porque acabaremos a las 21:30h después de ver la ceremonia del Cañonazo.

Empezamos a las 12:45h, si tú tienes menos tiempo en la Habana, por supuesto intenta aprovechar más la jornada completando la ruta hasta el mediodía.

Mediodía – Castillo de la Punta y fortaleza de la Fuerza Real

13:00 – Salida del hotel

Pedimos un taxi en el Hotel pero nos cobraban 20 $ por lo que decidimos irnos por nuestra cuenta andando y tomar un taxi en el camino. Al final nos interceptó uno a los pocos metros del Hotel y nos dijo si necesitábamos transporte. Cuando le interrogamos por el precio, nos dijo que unos 15 $, y que era el mismo Taxi que habían llamado los del Hotel, pero que suelen cobrarse 5$ del servicio.

No nos habíamos equivocado porque eso lo suelen hacer en la mayoría de los hoteles. A pesar de ello, otro día hicimos lo mismo y tuvimos que volver al hotel ya que nos fue muy difícil encontrar taxi libre en la zona. Tenéis que tener en cuenta que el país va falto de combustible y tampoco es como para ir dando vueltas sin sentido intentando encontrar un cliente.

13:30 – Fortaleza de la Punta

Pasando frente a la fortaleza de la Punta, le dijimos al taxista que nos dejara ahí mismo para así además de ver la fortaleza y la entrada del paso estrecho de agua hacia el puerto de la Habana, poder ver la fortaleza del Morro desde el lado de la fortaleza de la Punta y entrar a esta.

El Castillo de San Salvador de La Punta, construido entre 1589 y 1630, de estilo renacentista y diseñado originalmente para proteger la entrada a la bahía de La Habana de los ataques de corsarios y piratas. ¿Sabías que en 1630 se instaló una cadena de cobre entre La Punta y El Morro como medida defensiva adicional?.

Durante la invasión británica de 1762, parte de su estructura fue destruida, pero cuando los españoles lo recuperaron, lo reforzaron de nuevo. En el siglo XX, cumplió funciones militares, siendo sede del Estado Mayor de la Marina de Guerra y, tras 1959, Escuela de Milicias.

Hoy en día, el Castillo de La Punta es un museo y está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1982. Nosotros no pudimos ver mucho del interior porque estaban restaurándolo y solo pudimos admirar el patio de armas.

14:30 – Fortaleza de la Real fuerza de la Habana

Llegamos andando al Castillo de la Real Fuerza, primera y más antigua de las fortalezas de la Habana. Como podéis ver, ha pasado una hora desde que nos dejó el Taxi pero en realidad esto se puede hacer en menos tiempo, lo que nosotros con esto del blog, redes sociales y del YouTube, pues estuvimos grabando unos vídeos sobre estas fortalezas.

Deciros que esta fortaleza que hoy en día es un museo, estaba cerrada al público, al menos cuando nosotros la visitamos tanto el día anterior como este. Así que tuvimos que conformarnos con verla desde fuera. Recorrimos de nuevo tranquilamente la plaza de Armas de la ciudad.

Desde esta plaza nos dirigimos a la plaza Vieja, para recorrerla de nuevo y admirar los patios que hay en los soportales. No son muy espectaculares pero pasamos a verlos. Tras una vuelta por la plaza nos dirigimos hacia la zona del ferry para pasar al otro lado de la bahía, a la población de Casablanca, que está junto al Cristo de la Habana. Cuando llegamos al embarcadero del ferry nos dijeron que por la mala mar no salía hacia allí. Las olas y corrientes se debían al viento que hacía, a pesar del espectacular sol.

Nos dijeron que al no haber ferry salía un autobús que iba a la población de Casablanca, pasando bajo el túnel que conecta la plaza con el otro lado de la bahía. Tras un buen rato esperándolo nosotros y otra gente, decidimos coger un taxi porque ahí no pasaba ningún bus, y eso que decían que iban a pasar muchos más al anular el paso con el ferry. Estamos en Cuba y ya se sabe.

Tarde: Vistas panorámicas y acabar de explorar la Habana Vieja

15:50 – Ferri, al final Taxi al otro lado de la bahía

Cogemos un taxi, bueno, en realidad un coche clásico, pero no de los años 50, sino debía ser de entre los años 20 y 30 del siglo pasado. Lo regateamos hasta 4000 pesos por lo que nos pareció un precio bastante razonable y encima poder ir en un tipo de vehículo como ese. Un dos en uno.

16:20. – Cristo de la Habana

El Cristo de La Habana, al estilo del Cristo Redentor de Río de Janeiro, pero en vez de con vistas a Río de Janeiro pudimos contemplar una genial panorámica de La Habana.

Esta estatua la tenéis en la loma de Casablanca y con sus 20 metros de altura, representa al Sagrado Corazón de Jesús con una postura serena y protectora, mirando hacia la ciudad con una mano en alto y la otra cerca del corazón. Fue inaugurada el 25 de diciembre de 1958, pocos días antes del triunfo de la Revolución Cubana, convirtiéndose en uno de los símbolos más emblemáticos de la capital.

16:20. – Visita del museo casa del Che Guevara

Esta casa está junto al Cristo y le han convertido en un museo en memoria de este revolucionario que vivió en esta casa en la época en que se convirtió en el jefe de las tropas revolucionarias que se apostaron en el fuerte de San Carlos de la Cabaña. Esta casa era la del gobernador de ese fuerte antes de la conquista.

Recomendamos visitarla ya que el recorrido es rápido y la historia es interesante, pues está dedicado a la vida y legado de Ernesto "Ché" Guevara, quien ocupó la fortaleza de San Carlos de la Cabaña tras convertirse en Comandante en 1959. Años más tarde, en 1970, se transformó en un museo honorario, y en 2007 pasó a ser el actual Centro Cultural Casa del Ché.

En la exposición, podrás explorar su oficina, donde se conservan su escritorio, teléfono y objetos personales. Además, encontrarás una sala con artefactos relacionados con la revolución, como botas, maletines y una cámara. Las diferentes áreas están decoradas con fotografías, documentos y recuerdos que cuentan su historia, incluyendo espacios dedicados a sus pasiones, como el ajedrez y la lectura. También hay una pequeña tienda para llevarte algún recuerdo del Ché.

16:55 – Camino hacia la entrada de la bahía

Caminamos en dirección hacia el castillo del Morro, pasando junto al de la Cabaña, y también a una exposición de aviones y cañones y otros armamentos que habían junto al camino. 

17:18 – visitamos el castillo de los tres Reyes Magos del Morro y el faro

El Castillo de los Tres Reyes Magos del Morro es uno de los símbolos más representativos de La Habana, junto al Capitolio y la Giraldilla. Situado estratégicamente sobre un cerro, este castillo vigilaba la entrada a la bahía durante el periodo colonial español, formando, junto al Castillo de San Salvador de la Punta, una defensa casi impenetrable.

Sin embargo, en 1763 los ingleses lograron conquistarla, aunque poco después fue devuelta a España en un intercambio por la Florida. Fue entonces cuando Carlos III ordenó la construcción de una segunda fortaleza en el mismo lado del estrecho: San Carlos de la Cabaña, de la que hablaremos más adelante.

Recomendamos visitar el Morro tanto de día como de noche para disfrutar de las impresionantes vistas desde sus baterías y terrazas, con panoramas únicos de la ciudad al otro lado del estrecho. Es sin duda la más importante de las fortalezas de La Habana.

18:13 – Fortaleza de San Carlos de la Cabaña

Visitamos el castillo de San Carlos de la Cabaña, la mayor de las fortalezas de La Habana. Conocida como La Cabaña, esta fortaleza fue construida en el siglo XVIII junto a la fortaleza anterior, tras la devolución de La Habana por los ingleses en 1763, con el objetivo de reforzar la defensa de la ciudad. Su enorme tamaño la convierte en la fortificación más grande construida por España en América, destacando por su diseño militar avanzado para la época, con baluartes, fosos y caminos cubiertos que reflejan los avances de la artillería del siglo XVIII.

Actualmente, La Cabaña forma parte del Parque Histórico Militar Morro-Cabaña y la Casa del Ché. Una de sus principales atracciones es la ceremonia del Cañonazo de las Nueve, que cada noche revive la tradición colonial de disparar un cañón para marcar el cierre de las murallas de la ciudad. Hicimos tiempo tomándonos algo en la cafetería de la fortaleza, esperando la ceremonia del cañonazo.

Noche: Ceremonia del Cañonazo en Fortaleza de San Carlos de la Cabaña

20:00 – Espera del espectáculo

Salimos de la fortaleza a la entrada de esta, porque allí es el punto de reunión desde donde parten los visitantes, todos en grupo para presenciar el espectáculo. Las tropas caracterizadas dan la bienvenida a los visitantes y todos juntos entramos hacia el interior de la fortaleza. La espera de la ceremonia del cañonazo se hace un tanto larguilla, imagino que lo hacen para que la gente compre artesanías que se venden en la plaza. Nosotros simplemente miramos las luces de La Habana nocturna desde este privilegiado mirador.

20:45 – Inicio del espectáculo

Por fin!! de repente suena el sonido rítmico de los tambores, anunciando que el espectáculo está a punto de comenzar. Una voz fuerte y clara pide “silencio”, y el gentío se pone alrededor de la Batería de Ceremonia. Bajo una arcada de la fortaleza, aparece un pelotón de artilleros vestidos como soldados españoles del siglo XVIII: casacas y pantalones rojos, pelucas blancas y botas negras.

Los soldados desfilan al ritmo de los tambores, una tradición que ha marcado a la ciudad durante más de dos siglos.

21:00 – La ceremonia del Disparo del cañonazo

Con la llegada de las nueve en punto, toda la atención se centra en un soldado que, con una antorcha en la mano, se prepara para encender la mecha del cañón. La llama prende, y unos segundos después, un potente BOOM resuena por toda La Habana. El cañonazo te sobresalta, a pesar de que estábamos más que preparados y atentos a recibir el estruendo. No sé por qué, pero a pesar del sustazo, todo el mundo esboza una sonrisa.

Con este disparo se acaba el espectáculo y salimos de la fortaleza para negociar el precio de vuelta con alguno de los muchos taxis que esperan a la salida. Nosotros llegamos y nos fuimos por nuestra cuenta, si tú tienes el tiempo más justo o quieres ir más cómodo te dejamos esta opción para disfrutar del cañonazo en un Tour guiado que te recoge y te devuelve a tu alojamiento en este enlace.

Llegamos al hotel Grand Muthu La Habana, el alojamiento que escogimos para todos los días que pasamos en la Habana. Un hotel con habitaciones amplias y cómodas y con buenas instalaciones. Lo descubrimos cuando miramos hoteles en Cayo Coco, bueno, en realidad Cayo Guillermo, donde al escoger un Grand Muthu para ese lugar, nos decantamos repetir para la capital.

Más consejos además de visitar las fortalezas de la Habana

Esperamos que te haya ido bien este post de estas 4 fortalezas que han visto nacer y crecer a La Habana; si es así déjanos tu feedback, es decir, tus dudas, experiencias o consejos. ¿Conocías estas fortalezas? ¿Y la ceremonia del Cañonazo? ¿La has visto con tus propios ojos?

También puedes consultar todos nuestros posts para organizar tu viaje a Cuba aquí debajo y más tips de viajes en nuestra caja verde.

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